Por Robiro Teran, 12/10/2015
El Premio Nobel de la Paz es uno de los cinco Premios Nobel que fueron
instituidos por el inventor e industrial sueco Alfred Nobel. Al igual que las
demás categorías del premio Nobel, el Premio Nobel de la Paz se remonta al
testamento de Alfred Nobel, en el que disponía que se creara dicho premio y
estuviera dotado con los réditos de su fortuna. El texto original en sueco del
párrafo correspondiente dice así:
"... constituirá un fondo cuyos interés será distribuido cada año
en forma de premios entre aquellos que durante el año precedente hayan
trabajado más o mejor en favor de la fraternidad entre las naciones, la
abolición o reducción de los ejércitos existentes y para la celebración o
promoción de procesos de paz. El premio [...] para el defensor de la paz [será
concedido] por un comité formado por cinco personas elegidas por el Storting
noruego. Es mi expreso deseo que, al otorgar estos premios, no se tenga en
consideración la nacionalidad de los candidatos, sino que sean los más
merecedores los que reciban el premio, sean escandinavos o no."
El Premio Nobel de la Paz ha sido otorgado a 98 personas y a 20
organizaciones desde su creación en 1901. El Comité Internacional de la Cruz
Roja lo ha recibido en tres ocasiones, en 1917, 1944 y 1963; la oficina del Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, en 1954 y 1981. No fue
otorgado durante los principales años de las guerras mundiales.
En el momento que me enteré que 36 diputados chilenos, académicos de
prestigiosas Universidades y representantes de otros parlamentos del mundo,
enviaron una carta al Comité Noruego del Nobel postulando formalmente al Foro
Penal Venezolano (FPV) al Premio Nobel de la Paz 2015, por su destacada labor
brindando asistencia legal gratuita a víctimas de la violencia política, en lo
personal me causó una gran sorpresa, una alegría por reconocernos mundialmente
y al rato sentí un gran peso sobre los hombros, por el compromiso y
responsabilidad adquirida por el pensamiento y una sola idea compartida por
todos los miembros de nuestra organización como lo es la defensa de los
Derechos Humanos. o como diría Alfredo Romero "No hay que hacer justicia
por propia mano, pero está en nuestras manos que se haga justicia".
Luego comencé a ser memoria de cuando en el pasado de mi querido país
había sido reconocido en tal medida, y descubrí que Enero de 1982: una joven
guatemalteca de ascendencia maya llamada Rigoberta Menchú Tum, se reúne en
Paris con la escritora francesa de origen venezolano, Elisabet Burgos. De las
conversaciones que las dos mujeres mantienen durante dos semanas sale el libro
Me llamo Rigoberta y así me nació la conciencia, que narra la trágica historia
de la joven. Sin saberlo esto fué un detonante para que en 1992 se le otorgara
El Premio Nobel de la Paz a Rigoberta Menchú Tum "en reconocimiento a su
trabajo por la justicia social y la reconciliación etno-cultural basado en el
respeto de los derechos de los pueblos indígenas".
A mi consciencia lo único que me viene es agradecimiento, a cada una de
las personas que de una u otra forma contribuyeron a la nominación de nuestra
ONG, pero reitero las palabras de Alfredo Romero M. cuando en nombre del Foro
Penal Venezolano recibió del Sub Secretario de Estado de EEUU conjuntamente con
Gonzalo Himiob el premio de Defensores de los Derechos Humanos a la
organización no gubernamental venezolana Foro Penal, por defender el imperio de
la ley y el respeto a los derechos humanos, cito “CAMBIARIAMOS CUALQUIER PREMIO
POR LA LIBEACION DE TODOS LOS PRESOS POLITICOS QUE HAY EN VENEZUELA”.
En nuestros inicios fuimos un pequeño grupo de personas (2001)
preocupados por la situación de los DDHH en Venezuela, ahora 14 años después,
somos una organización con mas de tres centenares de abogados y mas de mil
defensores de DDHH, todos trabajando ad honoren, en la medida de las
posibilidades de cada uno, convencidos de que la defensa de los DDHH, no se
mendigan, se exigen.
Aprovecho la oportunidad de agradecer al Comité Nobel noruego por
permitir ser parte de los 276 candidatos para el premio de la Paz 2015,
desglosado en 49 organizaciones y 227 individuos.
Reitero las Felicitaciones al Cuarteto de Diálogo Nacional ganador de “El
Premio Nobel de la Pas 2015” por su contribución decisiva a la construcción de
una democracia pluralista en Túnez a raíz de la “Revolución Jazmín de 2011”.
De acuerdo al comité, la organización “estableció un proceso político pacífico
y alternativo en un momento que el país estaba al borde de la guerra civil” y
se convirtió de esta forma en un “instrumento para posibilitar que Túnez, en el
espacio de unos años, estableciera un sistema constitucional de gobierno
garantizando los derechos fundamentales de toda la población, sin importar el
género, las convicciones políticas o creencias religiosas”.
Me despido dándole las Gracias al Gran Arquitecto del Universo por
dotarnos de fuerzas a diario, a cada uno de los integrantes de esta
organización que su único objetivo es la DDHH y lograr la Paz y reconciliación
del País.
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