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martes, 1 de septiembre de 2015

¿Se acuerdan de los 140 millones de kilos de comida podrida en Pudreval? Por @damianprat


Por Damian Prat C.



Son tantas las preguntas que brotan desde la indignación en estos días de oprobio y vergüenza nacional puesta en marcha por una “cúpula podrida” que anda desesperada inventando situaciones de caos para tratar de impedir la rotunda derrota electoral que les va a propinar el pueblo venezolano en las elecciones parlamentarias. Cada vez hay menos escrúpulos. ¡Hasta el recurso horrible de la xenofobia contra los colombianos y/o descendientes de colombianos! ¡Se parecen tanto al repulsivo Donald Trump con su xenofobia (también con cálculo politiquero) contra los mexicanos! Y no solo eso, desatan esa operación inescrupulosa de hacer creer que el repudiable contrabando es culpa de unos grupitos de ciudadanos, tapando que ellos son el gobierno, han sido el gobierno todos estos años, son los que controlan las fronteras, los pasos fronterizos y las alcabalas. O sea que todas esas irregularidades del contrabando que hoy “denuncian” los del gobierno han ocurrido con su complicidad y cuando menos con su indolencia, “dejar hacer” e incapacidad.
Tienen el poder y la fuerza pública y sin embargo, el ‘bachaqueo’ grande, el de los grandes corruptos, ha pasado miles de camiones y gandolas de gasolina y productos de todo tipo “en las narices” de la cúpula roja, contando con su indiferencia, su indolencia, y ¿su complicidad? Pero ahora, ellos, los responsables de que eso ocurriera, arman una crisis, culpan a medio mundo, intentan crear un conflicto de grandes proporciones a ver si pueden suspender las elecciones. O hacerlas en condiciones aún más inestables, sin equidad y anormales de lo que ya son. Eso es el único fin de todo esto. Lo que les quita el sueño.

 ¿Nos acordamos de Pudreval? Fue en el 2010. Se descubrieron docenas de containers con alimentos varios ya podridos (al final resultaron ser cientos), en los patios de almacenamiento de BoliPuertos Puerto Cabello (controlados por la dupla roja rojita cubano-psuvista) y en otras áreas cercanas, incluyendo una en Cojedes y otras en Yaracuy. Lo que se pudo contabilizar fueron 140 mil toneladas de carne, pollo, leche, granos, avena, margarina y hasta azúcar y mucho más. Fue una operación de megacorrupción, irresponsable, desordenada y descontrolada donde muchos jerarcas rojos se enriquecieron groseramente trayendo alimentos a punto de vencerse, pagando sobreprecio (se imaginan lo de las comisiones) y al final los dejaron podrir por incapacidad de manejar semejante volumen de importaciones. ¡Fueron 140 millones de kilos de comida! ¿Cuántos millones de ‘bachaqueros’ se requerirían para movilizar semejante cantidad? ¡140 millones de kilos de comida que dejaron pudrir! Y cientos de millones de dólares malbaratados. ¡Y eso no fue por el paso fronterizo en el Táchira! Fueron ellos, haciendo clic en sus PC de lujo en sus cómodas oficinas de gobierno. ¿Lo recuerdan? Hubo tres detenidos que fueron puestos en libertad y restituidos en sus cargos. No hay nadie preso aunque medio gobierno ha debido ser destituido. Y ahora vienen a armar una chilladera culpando a cuatro pendejos a quienes les incautan 5 pimpinas de gasolina y un bulto de harina.



 ¿Nos acordamos de los 25 mil millones de dólares de los boliburgueses rojos rojitos que denunció Giordani? Los que se llevaron esa gigantesca fortuna con los dólares que aprobaba Cadivi a empresas “de maletín” que recibían dólares comprados a Bs. 6.30 para revenderlos a dólar libre. ¿Saben de algún jerarca rojo preso o destituido? ¿Por qué no hicieron una OLP para desmontar eso?

 ¿Nos acordamos de la cuentas en cientos de millones de dólares descubiertas en la banca de Andorra y Banco Madrid por las autoridades antiblanqueo de capitales de Europa y EE UU? Unas cuentas tenían 100 millones de dólares. Otras con 90. Y así. Los nombres, montos y detalles fueron publicados. Aquí, por ejemplo: http://mun.do/1AK3YvH. Y aquí http://bit.ly/1DZnrAn. Estaban varios viceministros, ex jefes del Sebin, militares 4F. Todos de la jerarquía roja rojita. Los fondos provenían de comisiones y sobornos por obras entregadas “a dedo”, sin licitación, para plantas termoeléctricas, Metro de Caracas, etc. Todas aprovechando convenientemente decretos de “emergencia” o “acuerdos estratégicos binacionales del más alto nivel” (siempre el lenguaje rimbombante para impresionar). ¿Ha pasado algo con eso? ¿Investigaron? ¿Sancionaron? ¿Reclaman extradiciones? Nada de eso pasaba por los “puestos fronterizos”. No eran “paramilitares chimbos”. Era el festín robo-lucionario con los dólares que ahora no hay para comprar medicinas. Es lo que tratan de tapar con el show inescrupuloso del “cierre de fronteras”.

¿Nos acordamos del ¡exprópiese!, las invasiones y confiscaciones de fincas otrora productivas y que los jerarcas llamaban “rescates”? ¿Ahora no hay leche? Llevamos varios años tomando leche de Ecuador, Argentina, Uruguay, Nicaragua, Colombia e incluso EE UU cuyos hacendados son felices por el “negoción” que han hecho gracias a la “revolución” de Venezuela. ¿Nos acordamos de los millones de kilos de carne que se producían en las grandes haciendas del llamado “Hato Inglés” en Cojedes? Ahora son montarrales casi improductivos. Arruinaron todo y ahora hay que importar la carne de una docena de países.

 ¿Nos acordamos del ¡exprópiese! a las plantas cementeras? Todas estatizadas. Todas improductivas. ¡Cómo cuesta comprar unos sacos de cemento! Esos que antes, sin sobreprecios, se compraban en cualquier ferretería. ¿Y las cabillas de Sidor y Sidetur? ¿Y las 300 mil toneladas de hojalata que ya no produce Sidor y que la industria nacional de envasados ya no consigue o debe importar? ¿Quién paga esa cuenta? ¿Son “patriotas” los destructores de todo eso?

 ¿Nos acordamos de los actos masivos para cedular colombianos que hacía el gobierno unos años atrás tratando de amarrar votos? Ahora, porque quieren crear caos político y hasta un conflicto internacional para sabotear las parlamentarias, apelan a la odiosa e inaceptable xenofobia. Atropellan y maltratan. Un trato infamante que nos avergüenza porque los venezolanos nunca hicimos cosas así. Haciendo creer que unas humildes familias de colombianos -muchos con hijos venezolanos- son los “malvados” y culpables de la corrupción de fronteras y el desastre económicos creado por el gobierno. Las abundantes fotografías nos muestran a personas humildes cargando camas, muebles, niños con sus juguetes a cuestas. ¿Eso son los “peligrosos paramilitares” inventados por el gobierno para tratar de justificar su incapacidad y brutalidad?

27-08-15




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